Lema del blog: "No busquen la verdad en palabras o escritos de los que ejercen el poder o cobran por su función amarilla"
Segunda Internacional Socialista, Congreso de Amsterdam, 1904 |
Socialdemocracia, desdibujada y falseada en la actualidad
La Constitución estadounidense de 1787 liderada por Thomas Jefferson, consistió en el primer gran paso del hombre para obtener un progreso y libertad que se había perdido hace casi un milenio y medio.
Las ideas expresadas en esta Constitución muy pronto fueron recogidas por el pueblo francés que en esos días conformaba la nación más avanzada del mundo, y posiblemente la más poderosa tras el descalabro británico en América.
Ese pueblo en su afán de progreso que conlleva las ansiadas libertades y justicia social expresadas por Jefferson y Benjamin Franklin, logró derribar al Poder existente, monolítico, elitista, hereditario, con moral basada en una religión que se aplicaba con dureza tanto al infractor fruta del poder o una ciencia que no se doblegarse a la narrada en la religión.
El pueblo francés se liberó de la Dictadura hereditaria, aquella monarquía. Sin embargo, los revolucionarios supliron con la violencia y la venganza la inteligencia y la cultura. Lógico fracaso del nuevo régimen, que Napoleón suprimió, pero mutó defectos y deficiencias por imperialismo y soberbia, y los "ancianos regímenes" europeos derrotaron a Napoleón en Waterloo durante 1815 y, claro, se apretaron las premisa sociales y policiacas de años precedentes: surgió el absolutismo, la negación de las libertades del hombre.
Y Europa cerró el progreso de todo tipo hasta febrero de 1848, fecha en la que el judío alemán Karl Marx secundado por Engels publicó El Manifiesto Comunista, en Inglaterra.
Los resultados sociales en Europa Continental superaron incluso a la sociedad británica, pues extensas regiones gobernadas por el Imperio de los Habsburgo se sublevaron lideradas por las clases media y la juventud, creándose Alemania e Italia.
El término comunista empleado por Marx y Engels se refería y dedicaba a la comunidad que sabía leer, a las clases medias y la juventud. Setenta años más tarde, Lenin se apoderó de él para cambiar el nombre del sanguinario Partido Bolchevique por el de Partido Comunista. El revolucionario filósofo social Marx quedaba encuadrado con Lenin y Stalin, mientras , por ello, las clases altas y cristianas europeas se liberaron de Marx.
Marx, Engels, Lenin y Stalin, una línea falsa del marxismo |
En 1865, el resultado de la Guerra de Secesióm marcó más la diferencias entre las etnias europeas afincadas en las orillas del Atlántico Norte. La americana se desnvovía en un ambiente de rápido crecimiento, la libertad rompía las pequeñas barreras, si no eran nulas, de orogen, patrimonio, enseñanza basada en la capacidad económica familiar y bien se podía aplicar lo de un hombre, un voto. No podía suceder lo mismo en la Democracia que EEUU había regalado a los europeos.
Antes de fallecer, Engels convocó en París la Segunda Internacional, que dirigió Karl Kautsky. El proyecto, que se logró totalmente, consistía en integrar al trabajador en el sistema democrático, ante la oposición de los anarquistas y de Lenin, que dedicó un ensayo; "el renegado Kautsky".
La Segunda Internacional logró que los regímenes europeos admitieran plenamente a los partidos de los obreros y de la denominada izquierda, a los sindicatos, a los medios de difusión de izquierdas y se trató adecuadamente el presente y el futuro de todos los trabajadores.
Además, la Internacional Socialdemócrata siguió albergando en su filosofía los tres fundamentos de Marx, el análisis sobre el Estado, el proletariado y la autodeterminación.
"Marx y obreros franceses en 1844", ´0leo de Hans Mocznay
Sin embargo en la actualidad, los autollamados socialdemócratas no los cumplen., actúan como los partidos de derecha, por lo tanto sobran con ese nombre. Veamos:
El Estado: un Estado democrático extendido por todas las naciones debe llevarlas al entendimiento, la libertad, la justicia social, es decir, al progreso, la paz y el bienestar. Ysegún se vaya avanzando en la calidad del hombre, sus instituciones y sus empresas, el Estado irá poco a poco adelgazando hasta, tróricamente extinguirse. Marx lo describió en su "Exti)nción del Estado". (Marx y Lenion tenían razón, hasta con el comunismo, el Estado se extingue).
Sin embargo, estos mamarrachos que se autideno,inan socildemócratas, solo consiguen engordar el Estado con cada vez más políticos, asesores, consejeros, periodistas amarillos, secretarios, etc
El proletariado necesita justicia social para valorar su trabajo,, su existencia, su progreso social.
Sin embargo, estos mamarrachos que se autodenominan socialdemócratas, insultan al proletariado con sus reiteradas muestras de prevaricación, enchufismo, saqueos, lujos etc
La autodeterminación de una sociedad numerosa y diferenciada es la mayor expresión de justicia social. Evidentemente hay que definir el cocepto de sociedad difr triada y el límite de la autodeterminación. Yo tengo escrito sobre Cataluña que si al menos dos tercios del censo, no de los votantes, desean la independencia o una mayor autonomía, hay que tratar el tema. Y si lo desea un ochenta por ciento, no se necesita tratar.
Sin embargo, estos mamarrachos que se autodenominan socialdemócratas, se pliegan ante el tema de la falsa Ucrania, un breve proyecto administrativo soviético uniendo dictatorialmente territorios cuyos habitantes sun de distinta cultura, idioma, historia, religión y hasta caligrafía. Estos mamarrachos, además, eluden el hecho bélico de la invasión militar de las repúblicas del Donbass por un testaferro en Kiev que rompió sin motivos el tratado que acababa de firmar en Minsk con rusos y las repúblicas de Donetsk y Lugansk.
Todo menos aplicar la autodeterminación para los diversos territorios de la falsa Ucrania, Y los autollamados socialdemócratas no sólo no defienden la justa y huma autodeterminación, sino que ayudan a cometer la repugnante masacre.
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