15 oct 2017

La batalla naval de Jutlandia. Los U-Boote. Scapa Flow. Dogger Bank

Gran Guerra. Jutlandia. La Grand Fleet en orden de batalla


                La batalla naval de Jutlandia. Scapa Flow. Dogger Bank


ES SEGURO este blog al no exigirse identificación ni permitirse comentarios pues pueden conllevar enlaces perniciosos. Los enlaces internos del blog están asegurados por Bloguer. Tampoco hay anuncios
.
El acorazado "Inflexible"
 camino de Gallipoli donde quedó

 varado tras chocar con una mina

Los submarinos alemanes

La creciente intervención de los submarinos alemanes, U-Boote, durante la Gran Guerra fue motivada por la continua recepción de material bélico y alimentos de Gran Bretaña a través de sus puertos. Frenar este comercio se consideró por Alemania como una acción fundamental para su victoria.
Debido a la exitosa intervención de los submarinos alemanes con bases en Ostende y Brujas, y analizando el hundimiento de numerosos barcos mercantes y mixtos de viajeros y carga bélica,  el Almirantazgo británico decretó que los buques con mercancías navegasen en grupo y apoyados por destructores y otros barcos de guerra.
El 7 de mayo del 1915, el trasatlántico estadounidense Lusitania fue hundido por el U-20, portando viajeros y material bélico. El Almirantazgo británico había dispuesto retirar la habitual protección naval. En el naufragio murieron 1.198 personas, de ellas 121 eran estadounidenses. El hundimiento del Lusitania creó el ambiente propicio en Estados Unidos para poder entrar en la guerra.
.
Al menos doscientos U-Boote fueron hundidos o averiados permaneciendo fuera de servicio en el transcurso de la guerra. Por su parte, la fuerza submarina alemana echó a pique a más de dos mil buques mercantes, mixtos o de guerra.
La actividad submarina, temporalmente fue reducida por iniciativa alemana cuando el 24 de marzo de 1916 un submarino hundió en el Canal de la Mancha al buque inglés de pasajeros Sussex, al confundirlo con un barco de guerra. Murieron ochenta personas, entre ellas el compositor español Enrique Granados. Sin embargo, la evolución de la guerra pronto forzó a incrementar la intervención de los submarinos.
El 9 de enero de 1917 se reanudó la actividad de los submarinos alemanes, que consiguieron hundir, durante los primeros, una media de medio millón de toneladas de mercantes al mes.

Gran Guerra , un U-boot. Imagen de la Librería de Defensa









                                           Combate naval en Dogger Bank 
.
El 28 de agosto de 1914 la armada inglesa hundió los cruceros alemanes Mainz y Köln.
 crucero-acorazado Blücher semihundido
Foto del archivo Bettmann-Corbis

El día 24 de enero de 1915, se produjo el primer enfrentamiento entre las armadas británica  e irlandesa contra la alemana en Dogger Bank, en el mar del Norte, al noroeste de Heligland; donde el almirante inglés David Beatty venció al vicealmirante germano Franz von Hipper amparándose en un número mayor de buques de guerra.
Las pérdidas humanas de los británicos fueron de poco más de una docena por cerca de mil muertos en la escuadra de la armada alemana, que sufrió el hundimiento de un crucero-acorazado, el Blücher, y las averías graves de otros buques de guerra. Cuando el Blücher estaba semihundido un dirigible alemán le confundió con un británico, echando al fondo del mar el buque y a los marineros en él apostados.
Los británicos sufrieron la baja de un crucero de batalla y un destructor, que pudieron retirarse a puerto para ser reparados.
.

                                                       Batalla de Jutlandia


La Grand Fleet zarpa de Scapa Flow hacia Jutlandia
.
Jutlandia, el Royal Oak,  gemelo del
Royal Sovereign y el Revenge

hundido en la WWII por el U-47

La flota inglesa, la Grand Fleet, sumada a las armadas de sus aliados, era muy superior en número y tonelaje desplazado a la que poseía la  Hochsee Flotte, Flota de Alta Mar de Alemania. Sin embargo, o debido a esta circunstancia, el mando naval alemán dirigido por el vicealmirante Reinhard von Scheer decidió atacar a los navíos ingleses acercándose a aguas próximas a sus bases. La flota alemana se hizo a la mar con ese propósito, por lo que durante los días 31 de mayo y 1 de junio de 1916 las flotas se enfrentaron por primera vez a gran escala.
.
El plan de operaciones germano, diseñado por Reinhard von Scheer, consistía en que los buques al mando del vicealmirante Franz von Hipper atrajeran a la flota dirigida por el almirante David Beatty para destrozarla, al atacar al unísono  los buques de Scheer y Hipper.
Pero los británicos conocían el código naval de los alemanes,  y no cayeron en la emboscada, se prepararon para la batalla y la Grand Fleet zarpó de Scapa Flow, base situada en las escocesas islas Orcadas. bajo el mando del almirante John Jellicoe, para encontrar a la flota alemana en aguas de Jutlandia, en el Mar del Norte, a unas ochenta millas marinas de esta península compartida por Dinamarca y Alemania.
La táctica británica consistió en que Beatty, una vez que hubiese contactado con los buques alemanes retrocediese, ganando tiempo para la llegada de Jellicoe. En su momento, Beatty maniobró enfrentándose a Hipper.
.
Acorazado SMS Lützow, ilustración
Los buques de la armada británica eran más veloces, pero los alemanes poseían más potencia de fuego y disponían de un mejor blindaje. A la media hora de combate, el HMS Indefatigable se hundió, llevándose a 1.000 marineros; otro tanto sucedió con el HMS Queen Mary y sus 1.200 hombres. El HMS Princess Royal, dañado, tuvo que abandonar la contienda. Entonces, Beatty retocedió hasta la llegada de Jellicoe, la desigualdad numérica de las flotas quedó manifiesta, siendo el Wiesbaden el primero en incendiarse, a poco le siguió el Seyllitz, y el acorazado donde navegaba Scheer, el Lützow,  por lo que el mando se trasladó al Von Moltke, hasta la retirada germana.

En la batalla de Jutlandia, también llamada de Skagerrak,  intervinieron más de doscientos buques. El tonelaje desplazado por los dos centenares de buques de la flota británica con 28 acorazados era más del doble que el del centenar de Scheer, que dispusieron de 16 acorazados. Los británicos perdieron más de seis mil hombres, seis cruceros y ocho destructores, con un total de 115.000 toneladas. Las bajas alemanas se cifraron en dos mil quinientos cincuenta hombres, seis cruceros y cinco lanchas torpederas, en total 61.000 toneladas.

David Beatty
Los británicos perdieron, además de ocho destructores, entre los buques de mayor tonelaje, tres cruceros de batalla: el Invincible con más de mil hombres, el Indefatigable y el Queen Mary.Por su lado, los alemanes tuvieron como bajas más sensibles: el  crucero de combate Lützow, el crucero blindado Pommern y cuatro cruceros ligeros.

Aunque se puede considerar que la victoria correspondió a la Hochsee Flotte, la realidad es otra, ya que el daño infringido a los alemanes fue en proporción más grande, puesto que este país comprometió en la batalla naval casi todos sus recursos navales. Debido a ello, los alemanes dejaron en el futuro el control del Mar del Norte, único mar al que tenían acceso, a los británicos. Desde entonces, los germanos sólo mantuvieron activos en el océano a sus submarinos.
Cuando en octubre de 1918, Scheer preparaba un ataque resolutivo de la armada bajo el mando de Franz von Hipper para intentar cambiar el signo de la guerra, los motines de la marinería en Wilhelmshaven y en la base naval de Kiel, donde se formalizó un "Consejo de Trabajadores y Soldados" a semejanza de los sóviets, impidieron cualquier acción. Se había trasladado también a la marina la revolución dirigida por Karl Liebknecht que aceleró el final de la Gran Guerra y sumió a una Alemania obligada a empobrecerse en una auténtica guerra civil. El armisticio del 11 de noviembre de 1918 que puso punto final a la guerra encontró a la Hochsee Flotte anclada en puerto.
                                                              Scapa Flow


La Hochsee Flotte en Skagerrak a Jutlandia
Finalizada la guerra, se ordenó a Alemania que su flota, transportada por marinos de rango, fuera internada en Scapa Flow. Allí, el 21 de junio de 1919,el almirante al mando, Ludwig von Reuter ordenó hundir la Hochsee Flotte, movido por el temor de que fuese utilizada en el futuro contra su país. aprovechando que la flota británica había zarpado para realizar maniobras. Casi toda ella se fue al fondo del mar, encabezada por cinco cruceros de batalla o pesados y otros tantos cruceros, diez acorazados y 44 destructores con un total de algo más de 400.000 toneladas. Tres cruceros convencionales y cuatro  destructores quedaron varados, al igual que el acorazado "SMS Baden" que tuvo que ser posteriormente echado a pique. Nueve marineros alemanes perecieron en la operación.
Por las disposiciones del Tratado de Versalles toda la marina mercante alemana fue requisada.
Crucero "Invincible" hundido en Jutlandia

El trato dado a Alemania en Versalles, y en concreto a todos sus buques, contrasta con las exigencias alemanas a la derrotada Francia tras la guerra francoprusiana iniciada por Napoleón III por temas secundarios. Ningún buque francés paso al vencedor.
Lo mismo  sucedió en 1940, cuando habiendo los franceses declarado la guerra sucumbieron. Entonces, tras firmarse la rendición y el tratado de paz, ningún buque francés fue requisado por Alemania, quedando los de guerra fondeados en Tolón y Mazalquivir bajo almirantes franceses y un gobierno instalado provisionalmente en Vichy mientras permaneciese la guerra entre el Reino Unido y Alemania. Con el detalle que Alemania en 1940 estaba necesitada de buques de todo tipo, al partir de cero unos años antes.
Está usted dentro de "Jose Antonio Bru Blog".
...................................................................................

           1914,  el submarino U-9 regresa al puerto, Wilhelmshaven, óleo Willy Stöwer

U-boot por Willy Stöwer

El crucero-acorazado Blücher hundido en Dogger Bank, óleo Willy Stöwer